Chocoaventura con mordelon

Desde hace unos años me gusta un amigo de mi hermano, pero siempre han habido varios peros: es extrañamente parecido a mi hermano (lo cual me provoca muchos escalofríos), me lleva 14 años de ventaja, a sus ojos siempre soy la "hermanita" de leandro, y por ultimo tiene una novia espectacular con la que simplemente no hay competencia.

Hace poco viaje con él a bogota, al principio estaba un poco nerviosa por hacer conversación por 8 horas y demás pero todo resulto lo mas de bien, volví con un gusto aun mayor hacia él, sabiendo que había terminado con su novia y que al menos ahora me reconocía mas como persona individual y no como una extensión familiar de alguien.

Hace unos días fuimos a bailar, eramos muchos y de entre toda la gente nos encontramos él y yo, extrañamente esa noche mi hermano que es el punto común se perdió y nos dejo solos, empezamos a bailar y el me dice que esta muy borracho (lo cual a mi no me parecía), de esta forma los dos nos buscamos y nos besamos. El se preocupo un poco, entonces yo le aclare que no esperaba nada suyo, que sabia que estaba enamorado de otra persona, que no podía comprometerse con nada ni con nadie, que simplemente la pasáramos bien. A eso de las 3:30 am la gente comenzó a irse debido a la cantidad de borrachos que había en el lugar, ni mordelon ni yo queríamos irnos, por esto cuando todo el mundo estaba cogiendo un taxi, el y yo corrimos, por la calle, a las afueras de manizales, hacia un lugar donde vimos una silla y nos sentamos a conversar, pasamos un rato allí y luego fuimos a chipre, con el amanecer entre las manos, nos refugiamos detrás de un monumento, donde el barro, la obscuridad y la adrenalina de que alguien nos viera, nos atrapo en una sexualidad increíble. Pasamos una noche genial juntos, como esas que me solían acompañar hace tiempos cuando era mas espontánea e impulsiva (mas!!!), con lo cual yo con mis 22 años y el con sus 36 nos sentimos niños otra vez, corriendo, escondiéndonos en los parques, tomados de la mano, observando el amanecer y aguantando frío bajo las miradas acusadoras de los ancianos que salen a correr temprano en la mañana.
Por esta vez no me siento culpable, no me siento mal, estoy tranquila y un poco nostálgica, con algunos moretones en las piernas y un poco mas libre, con ganas de terminar lo que se empezó, evitando siempre responder las preguntas que me hacen y por supuesto que mi re-celoso hermano se entere de lo que paso. Mordelon me dijo que viajaba de nuevo a bogota en 15 días, mucha gente me ha dicho que ya partió, una parte de mi quiere verlo de nuevo, quiere que la situación sea tal que podamos seguir donde nos quedamos, en esa explosión de sentimientos en la cual yo solo podía modular un simple "si" a todo lo que mordelon me decía, donde por primera vez en mi vida no tuve el control, donde fui la víctima, de un delicioso experimento.